La nominación
El Delta Estero Real es una de las cuatro bahías que forman parte del sistema ecológico marino del Golfo de Fonseca, que tiene una línea costera de 409 kilómetros, de los cuales 77 kilómetros pertenecen a Nicaragua.Para formar parte de la Red Hemisférica de Reservas de Aves Playeras, el país que desea integrarse debe ser presentado por un socio, el cual nominará un área dentro de las tres categorías existentes: sitios o paisajes de importancia hemisférica, sitios de importancia internacional y sitios de importancia regional.
El Delta Estero Real cumple para ser escogido en cualquiera de las categorías, detalló Jarquín.
El sitio cuenta con la presencia de 30,000 aves playeras, por lo que puede clasificar en la categoría de importancia regional.
También se destaca por tener el 45% de la población de una sola especie, como es el caso del Charadrius wilsonia, que presenta concentraciones de hasta 7,000 aves, lo que permitiría a Nicaragua entrar en la categoría de importancia hemisférica e internacional.
No obstante, para ser nominada el área debe tener importancia demostrada para las aves playeras y contar con la aceptación escrita de los propietarios de que priorizarán la conservación, protección y manejo de las aves playeras.
Por otro lado, la nominación es un acuerdo voluntario en el que los que manejan el área se comprometen a incluir en su agenda la conservación de las aves playeras.
Jarquín afirmó que la integración a la red es de gran importancia, debido a que podría despertar el interés de organismos internacionales que trabajan en pro de la conservación de los recursos naturales.
El Delta
De acuerdo con la Red Hemisférica de Reserva de Aves Playeras, la protección de estas especies es de alta prioridad internacional, debido a que se encuentran entre las migratorias de larga distancia más ambiciosas e increíbles de la naturaleza, las cuales están decreciendo con rapidez.El Delta Estero Real es un área importante para la conservación de las aves playeras y acuáticas, debido a que alberga humedales y planicies lodosas intermareales, donde se alimentan y se refugian alrededor de 29 especies.
Jarquín explicó que cada año miles de aves playeras visitan el Delta, formando parte del ciclo biológico en los ecosistemas tanto de manglar como planos lodosos y lagunas, por lo que durante las migraciones grandes bandadas se alimentan de miles de invertebrados, manteniendo un equilibrio en la productividad biológica de los ecosistemas.
La presencia de estas aves puede ser considerada como un indicador de calidad de los hábitats, debido a que la presencia o ausencia de estas podría determinar la salud de los ecosistemas en un tiempo determinado.
Salvadora Morales, directora de Quetzalli Nicaragua, indicó que la zona es vital gracias a que en algunos casos concentra hasta el 50% de una sola especie.
¿Cuál es el beneficio?
La integración a la red tendrá un gran beneficio para el área del Delta Estero Real, debido a que se crearían campañas de concientización para fortalecer programas de educación ambiental, construcción de nuevos acuerdos y mecanismos de gobernanza para mejorar el manejo del área.“Con la integración del Delta a la red se pretende promover la conservación del ecosistema para las aves playeras, de tal manera que se creen alianzas público-privadas o institucionales, elaborar proyectos de conservación de nuestros recursos naturales involucrando a las comunidades”, manifestó Jarquín.
Además, a través de esta iniciativa las empresas camaroneras de la zona podrían considerar emplear buenas prácticas del cultivo de camarones, que beneficiaría los hábitats para las aves playeras.